La República Argentina organizado como república representativa y federal, situado en el extremo sureste de América. Su territorio está dividido en 23 provincias y una ciudad autónoma, Buenos Aires, capital de la nación y sede del gobierno federal. Su territorio continental americano, que abarca gran parte del Cono Sur, limita al norte con Bolivia y Paraguay, al nordeste con Brasil, al oeste y sur con Chile y al este con Uruguay y el Océano Atlántico.
Su extensión es de 2.780.400 km² convirtiéndolo en el segundo país más extenso de América del Sur, cuarto en el continente americano y octavo en el mundo.
Pero si además de la superficie continental sujeta a su soberanía efectiva consideramos el total de su territorio la superficie total se elevaría a 3.761.274 km².
Su PBI nominal es de 326.474 millones de dólares, ocupando la posición 30 de los países más importantes del mundo según este indicador.
Tiene una población total de es un estado soberano, 40´134,425 millones de habitantes y sus indicadores, como, índices de desarrollo humano, renta per cápita, nivel de crecimiento económico y calidad de vida, que se encuentran entre los más altos de América Latina.
Según The Economist la Argentina ocupa el noveno lugar entre más de 100 países con un USD 8.214 - El Ingreso per cápita sería cercano a los u$s12,500 - Eso la ubica primera entre las naciones de América Latina.
La inversión extranjera directa (IED) en Argentina alcanzo 7,979 millones de dólares en 2008, lo que represento un aumento de 23% en relación al año anterior. El crecimiento de la IED podría deberse en gran medida a la implementación de nuevos tratados con otros países y algunos más entre MERCOSUR y otros países.
Argentina-México ACE 6
Mercosur-Chile ACE 35
Mercosur-Bolivia ACE 36
Acuerdo Marco Mercosur-México ACE 54
Mercosur- México (Sector Automotor) ACE 55
Acuerdo Marco MERCOSUR-Comunidad Andina ACE 56
Mercosur Perú ACE 58
Mercosur-Comunidad Andina ACE 59
Mercosur- India
Mercosur- Cuba
Mercosur- Israel
Mercosur - Consejo de Cooperación del Golfo (CCG)
Mercosur- Egipto
Mercosur
Mercosur- Turquía
Mercosur- Jordania
Mercosur - SACU
Las IED aumenta en gran medida debido a que Argentina ofrece una base sólida de recursos atractivos para las inversiones; diferentes perfiles de recursos humanos calificados, con atractivas combinaciones de capacidades y habilidades; muchos talentos de gran reconocimiento internacional desempeñándose en Argentina y en el exterior, universidades de prestigio y centros de investigación de alta capacidad, que imprimen conocimiento y valor a la abundante y rica oferta de recursos naturales e industriales, con costos competitivos sobre una base de infraestructura desarrollada y en expansión.
Dentro de este contexto, tanto el sector agropecuario, como las diferentes áreas productivas, sumado al desarrollo de nuevas tecnologías aplicadas a las manufacturas, y el crecimiento del comercio exterior (motorizado por la alta competitividad del peso argentino)- han hecho del país un lugar óptimo para las inversiones.
El sector agropecuario es uno de los principales pilares de la actividad económica. Argentina es el octavo país del mundo medido en términos de su extensión geográfica y uno de los principales lugares con mayor dotación de tierras aptas para la producción agrícola y ganadera; sumada a otros recursos naturales, como el petróleo y la minería. Además, su extensión de ríos y una costa atlántica de más de 4000 kilómetro, hacen al país apto para la pesca.
Los productores argentinos, en busca de diferenciales competitivos y comparativos, introdujeron en las actividades agrícolas – ganaderas tecnología para optimizar los resultados de su trabajo. Gracias a la tecnología agropecuaria, en los últimos 60 años la frontera productiva se amplió en 10 millones de hectáreas. Así, el país se convirtió en uno de los principales exportadores de soja, trigo, maíz y frutas como la manzana, la pera o el limón, entre otros.
Argentina exportó el año pasado a la Unión Europea (UE) más de 15 millones de toneladas de productos de origen animal y vegetal. Los principales destinos de estas exportaciones fueron España, Holanda, Italia, Alemania y Francia. China es, de los países de oriente, un destino privilegiado de los productos agrícolas locales.
El sector vitivinícola es otro producto de este sector. En la actualidad, la Argentina se ubica entre los primeros productores de vinos a nivel mundial. Esta industria se ha desarrollado de tal forma que ha logrado conquistar mercados de exigentes consumidores, así como un creciente número de turistas que desean compaginar ocio y degustación en las bodegas que se despliegan en los distintos caminos del vino.
En los últimos cinco años, la actividad industrial creció sostenidamente, favorecida por la fortaleza de la demanda interna y externa y por su mayor capacidad competitiva. Hoy la expansión de la oferta productiva permite responder a una creciente demanda externa sin desatender al dinámico consumo local. El aumento de la inversión y la dinámica incorporación de trabajadores han posibilitado el incremento de la productividad industrial, elevándola a niveles máximos históricos.
Argentina inició un recorrido en pos de la sustitución de importaciones, basado en el modelo de un peso competitivo a nivel internacional, política que logró potenciar los diferentes sectores industriales del país. Con el esquema económico de alta competitividad local e internacional, Argentina volvió a ser fuerte en el sector automotor, la construcción, la siderurgia, la metalmecánica. Y por qué no la energía nuclear, ya que desde empresas públicas y privadas se trabaja en la fabricación de reactores nucleares para investigaciones científicas.
Un tema relevante en cuestión de comercio son las relaciones con los grandes países asiáticos. La integración de China al mundo capitalista es uno de los cambios más notables de la estructura económica global de las últimas décadas, y su impacto será importante no solamente en aspectos económicos sino en todas las dimensiones de las relaciones internacionales. Las relaciones económicas comerciales entre Argentina y China son muy buenas porque registra un aumento muy importante cada año. Según las estadísticas chinas a partir del 2003, cada año registra 1 mil millones de dólares de aumento. El año pasado el volumen de comercio llegó a 5.700 millones de dólares. Y la balanza es favorable hacia Argentina. Exportan 3.700 millones de dolares a China y China exporta 2.000 millones de dólares.
Los productos que exporta Argentina son principalmente soya y aceite de soya y girasol. Pero las relaciones económicas no se limitan a estos aspectos sino que hay otros rubros como, por ejemplo, las inversiones. China comienza a ver la posibilidad de hacer inversiones en Argentina. Una inversión importante se efectuó en una mina de hierro en Sierra Grande. China ya ha invertido más de 130 millones de dólares en esta mina y ahora la producción está ya casi está recuperada.
Con relación a las importaciones que Argentina realiza desde China, es claro que las mismas no solamente han crecido cuantitativamente sino que cada vez es más evidente el aumento del contenido tecnológico de las mismas.
El reconocimiento de Argentina del status de “economía de mercado” a la Republica Popular China en Noviembre del 2004, significó también reducir las posibilidades de hacer uso de mecanismos de defensa comercial. Ello es así porque el nuevo carácter que se reconoce a la economía china influye sobre la metodología para calcular el margen de dumping. La nueva situación puede determinar en muchos casos márgenes menores o nulos; aunque los sectores industriales pueden también apelar a otros instrumentos del Protocolo y del grupo de Trabajo sobre la Adhesión de China a la OMC.
El modelo económico iniciado en abril de 2002, ha permitido revertir paulatinamente los desequilibrios macroeconómicos y sociales acumulados durante la convertibilidad y agudizados con su derrumbe. A poco más de tres años de una sostenida expansión, la economía ya ha recuperado la totalidad de la caída, y hoy el país se encuentra en la etapa de consolidación del crecimiento.
Ello se ha logrado gracias a una política económica consistente, que ha posibilitado una recuperación de los equilibrios macroeconómicos básicos y se ha traducido en una importante recuperación de la inversión, en un superávit comercial récord –merced a exportaciones que también se encuentran en su máximo histórico–, en una inflación moderada, y en una sustancial mejora de los indicadores sociales.
Uno de los aspectos distintivos del modelo en marcha es el profundo cambio que se produjo en los precios relativos, que favorece a los sectores transables, la producción, el trabajo nacional y la inversión, y que dinamiza la demanda, determinando una nueva estructura productiva, ocupacional y de distribución del ingreso.
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